Descubra los paisajes de la frontera natural entre Argentina y Paraguay con este tour de cloro en el río Pilcomayo, donde puede disfrutar de un recorrido en barco.
Precio
El precio de esta actividad es de 11,70 €.
*Precio puede variar según disponibilidad y fecha.
Idioma del Guía y Tiempo de la Actividad
Español
Excursión al río pilcomayo
Excursión al río pilcomayo 2022
en honda esperan la llegada de una subienda en medio del
Sumérjase en la rica cultura y tradiciones de Bolivia explorando sus lugares de visita obligada, desde la capital más alta del mundo, La Paz, hasta las huellas de dinosaurios que han batido récords, pasando por los fascinantes paisajes y, finalmente, por el mayor lago salado del mundo, el Salar de Uyuni.
*Los viajeros deben gozar de buena salud y sentirse cómodos caminando o de pie durante largos periodos de tiempo. Las actividades diarias pueden incluir recorridos a pie por la ciudad, visitas a lugares de interés, paseos en coche o caminatas fáciles, con opciones de actividades más físicas como el senderismo o el piragüismo.
Esta excursión también puede realizarse como viaje guiado si prefiere explorar con un guía. Se trata de una gran opción para aquellos que buscan minimizar el estrés de visitar una ciudad o un país desconocido por sí mismos. Póngase en contacto con nosotros para obtener más información.
La Paz, día de llegadaDía 1Bienvenido a La Paz, la capital más alta del mundo situada a más de 3.500 metros sobre el nivel del mar. Un guía le ayudará con el traslado al hotel.Si es la primera vez que visita las alturas, tómese su tiempo para descansar, beber agua y no caminar rápido. Dormir también ayuda a aclimatar el cuerpo.
el ferry ya navega por el río paraguay
2ª fuenteLa fuente más lejana del tronco principal Pilcomayo – ubicaciónMunicipio Santiago de Huari, Oruro, Bolivia – coordenadas19°23′36″S 66°25′5″W / 19.39333°S 66.41806°W / -19.39333; -66.41806 – elevación4820 metros
El Pilcomayo (en grafía hispanizada)[2] (quechua Pillkumayu o Pillku Mayu, pillku rojo, río mayu,[3] «río rojo», guaraní Ysyry Araguay [ʔɨsɨˈɾɨ ʔaɾaɰʷaˈɨ]) es un río de América del Sur central. Con 1.100 kilómetros de longitud,[4] es el afluente occidental más largo del río Paraguay. Su cuenca de drenaje tiene una superficie de 270.000 kilómetros cuadrados y su caudal medio es de 200 metros cúbicos por segundo[4].
El Pilcomayo nace en las estribaciones de la cordillera de los Andes, en el departamento de Oruro (Bolivia), al este del lago Poopó. Se considera que el río Jach’a Juqhu es el origen del Pilcomayo[5]. Aguas arriba, el río Jach’a Juqhu recibe sucesivamente los nombres de Aguas Calientes y Kachi Mayu. A partir de la confluencia con el Chillawa (Chillahua), el río recibe el nombre de Pilcomayo[6][7] Desde allí, fluye en dirección sureste por los departamentos de Chuquisaca y Tarija, pasa por la provincia argentina de Formosa y la llanura del Gran Chaco paraguayo, formando la mayor parte de la frontera entre estos dos países antes de unirse al río Paraguay cerca de Asunción. El Parque Nacional del Río Pilcomayo se encuentra en el lado argentino de la frontera. También forma una breve parte del límite entre Argentina y Bolivia, justo antes del triángulo Argentina-Bolivia-Paraguay.
mapa del río pilcomayo
El Pilcomayo se ha ganado un siniestro epíteto: «el río suicida». Con una extensión de más de 1.000 km, atraviesa con dificultad la vasta región del Gran Chaco sudamericano, formando una frontera natural entre Bolivia, Paraguay y Argentina. Cuando las lluvias son intensas en la cuenca alta, el río arrastra enormes cantidades de sedimentos, hasta el punto de que puede llegar a obstruirse por completo, provocando desastrosas inundaciones.
Moresco se refiere a las históricas inundaciones que afectaron a la provincia de Salta, en el norte de Argentina, a principios de 2018. Las carreteras quedaron sumergidas, cientos de casas se derrumbaron y más de 10.000 personas de las comunidades indígenas wichí, toba, chorote y tapiete fueron evacuadas. Las casas que no se cayeron quedaron hundidas en casi un metro de barro.
«Estuvo lloviendo desde algo así como las cinco de la mañana hasta las tres de la tarde, y se inundó todo aquí», recuerda Víctor García, ganadero del pueblo de La Gracia. «Hacía años y años que no caía esa cantidad de agua».