¿Eres aventurero? ¿Estás buscando un lugar para hacer la peregrinación? En España tienes muchas opciones disponibles. Sin embargo, te recomendaremos recorrer el Camino Primitivo, que es aquel que va desde Oviedo hasta Santiago de Compostela. Una experiencia única e innovadora que hará realidad tus sueños.
¿Qué es lo que hace especial a este recorrido? Muchas cosas. Para empezar, el nombre, que se atribuye a la peregrinación del rey Alfonso Segundo de Austrias, en el siglo IV. Además, también es considerado una ruta dura, con muchas trabas, pero con un hermoso paisaje que hará que todo el viaje valga la pena. Así que no pierdas la oportunidad y continúa leyendo este artículo, para que te enteres de la mejor ruta en el Camino Primitivo.
Cosas a tener en cuenta antes de realizar la peregrinación
¿Cuántos kilómetros se recorren por día?
Siempre existe la duda de cuánto tiempo estarán caminando quienes decidan emprender esta aventura. Si también tienes la duda, pues te comentamos que lo normal son 20-25 km diarios, así que ten esto en cuenta antes de tomar la decisión final.
¿Se puede realizar el Camino Primitivo en bici?
Hay peregrinos que son arduos aficionados a las bicicletas y, por lo tanto, suelen usarlas hasta para viajar. Si ese es tu caso, puedes estar tranquilo, pues está permitido hacer la ruta con este medio de transporte.
¿Se disfruta del viaje?
Aunque da la impresión de que este es un camino duro que solo se hace con la intención de cumplir una meta personal, no es así. Al menos no del todo. Durante el recorrido, vas a observar algunos de los paisajes más destacados de España y disfrutarás también de un viaje en el que conocerás mucha información con respecto a la cultura clásica.
¿Cuál es la mejor ruta para hacer el Camino Primitivo?
Hay varias opciones a la hora de empezar con este viaje. Sin embargo, acá te explicaremos el camino más fácil, el cual consta de 11 etapas, muchas más que otras rutas como la del Camino Lebaniego, por ejemplo. Presta atención, porque desde este momento pondremos rumbo a una divertida aventura. ¡Vamos a allá!
Oviedo – Grado
En la primera etapa arrancamos con todo: 21.0 km de lleno. Arrancaremos desde la Catedral de El Salvador de Oviedo y luego tomaremos la calle Codavonga. Ese es el camino más idóneo para poder seguir avanzando sin problemas.
Si continúas, podrás ver el bar El Cruce, donde tendrás la oportunidad de probar la cerveza artesanal que ofrecen. Además, también pasarás por Santiago de Pañiceres, que es un pequeño pueblo en el que se hace alusión al a cultura clásica.
Grado – Salas
Ahora prepárate, porque al culminar la etapa pasada, entrarás en 21.7 km. Y es justo aquí donde te toparás por primera vez con la subida a San Juan de Villapañada, el primer desnivel significativo del viaje. Aquí es recomendable asistir a los albergues para los peregrinos, que son totalmente gratuitos.
Cuando hayas descansado, deberás seguir caminando, pero esta vez, cuesta arriba, por la senda El Morriondo. Luego, tendrás que continuar avanzando hasta que veas las aguas cristalinas del Río Narcea, donde podrás sumergirte en las mágicas aguas y volver a descansar si así lo deseas. La recomendación es que lo hagas, ya que aún hay un largo camino por delante.
Salas – Tineo
Es momento de acortar un poco el recorrido en esta etapa. Por lo tanto, ahora solo tendremos que recorrer 18.4 km. Este es el paso en el que verás mayor cantidad de pueblos. Por ejemplo, lo primero que verás será La Pereda o el Monasterio. Sin embargo, las paradas son opcionales, así que es mejor continuar de momento.
Tineo – Pola de Allande
Esta es una de las etapas más largas, con hasta 31 km, así que asegúrate de estar bien hidratado y de tener unas buenas botas. Aunque no lo creas, seguirás escalando altitudes y te ubicarás en el popular Camino de la Sierra. Verás una localidad muy peculiar, en la que tendrás dos opciones para seguir avanzando: caminar en línea recta por la carretera o entrar por los atajos que te indican los letreros. En ambos casos, llegarás al próximo destino.
Pola de Allande – La Mesa
Cuando llegues a Pola de Allande, te darás cuenta que es la etapa más dura de todas, pero también la más hermosa. Aquí no tendrás muchos pueblos cerca, pero verás los mejores paisajes. No hay pérdida, solo debes caminar en linea recta hasta que hayas cumplido los 21 km. Solo allí, verás el pueblo de La Mesa.
La Mesa – Grandas de Salime
Al entrar en La Mesa, verás que solo hay un camino por tomar, así que no tendrás muchas opciones. Te darás cuenta que esta es una zona completamente verde, con bosques y árboles por doquier. Pero no te preocupes. Solo serán 18.1 km que pasarán a una velocidad muy acelerada si te lo propones.
Fonsagrada – Cadavo Baleira
Aquí regresamos una vez más a las rutas largas. Pues, cruzar Fonsagrada no es nada fácil, son un total de 21.5 km. Cuando llegues a este paso, te darás cuenta que estarás a más de mil metros de altura, lo cual quiere decir que has seguido subiendo sin parar. Una vez más, solo deberás seguir en línea recta.
Cadavo Baleira – Lugo
La etapa más bonita es sin duda esta. Son 30 km, pero ni te darás cuenta de lo rápido que pasarán, ya que estarás emocionado admirando toda la belleza natural que te ofrecen los campos floreados y la Calle Real. Al seguir esta ruta, tendrás que pasar necesariamente por el pueblo de Santa María. Una vez que lo hayas hecho, habrás llegado al final y entrarás en la zona de Lugo.
Lugo – San Román da Retorta
En este punto llega una parte fundamental de la peregrinación, ya que, durante los siguientes 20 km, pasaremos por el Puente Romano, una de las eminencias del mundo. Se trata de una estructura hecha a base de piedra que es de interés turístico en muchas partes del mundo. Si cruzas el puente, llegarás al poblado de San Pedro de Mera y medio kilómetro más adelante, te toparás con un hospital municipal. Así que deberías aprovechar para entrar por si tienes alguna molestia, ya que, al caminar un poco más, estarás en San Román da Retorta.
San Román da Retorta – Melid
El resto de kilometraje es para llegar al destino final: Melid. En este trayecto, tendrás que cruzar un camino muy ancho, en el que el único obstáculo es un puerto montañoso que verás cerca de unos molinos de vientos. Del resto, será un paseo muy entretenido con un clima que varía mucho y que disfrutarás mucho.
Al finalizar el camino primitivo, te darás cuenta que todo por lo que pasaste valió la pena. Dicen que, en la recta final, recibes un golpe de espiritualismo que te cambia la vida. Increíble, ¿no? Pues, solo hay una forma de comprobarlo, así que llénate de valor y atrévete a comenzar esta aventura.