¿Se evitan las tormentas en pleno vuelo? Sí, los aviones cuentan con radares meteorológicos que permiten evitar las tormentas peligrosas, en especial aquellas que involucran actividad eléctrica o granizo.
Para evitar problemas durante tormentas: Se emplean radares meteorológicos avanzados para detectar formaciones de nubes de desarrollo vertical. Los pilotos ajustan la ruta de vuelo para rodear tormentas severas y evitar vientos cortantes (windshear).
Seguridad: Las tormentas eléctricas pueden producir turbulencias severas, rayos, granizo y vientos fuertes, todo lo cual puede poner en peligro la seguridad del vuelo. Evitar estas tormentas ayuda a prevenir incidentes durante el vuelo y garantiza la seguridad de los pasajeros y la tripulación .
Se trata de los vuelos en avionetas que lanzan bengalas de yoduro de plata en las nubes de tormenta, para generar la reducción del tamaño del granizo y así mitigar los daños que puede provocar su caída en zonas pobladas y productivas.
La jaula de Faraday es una estructura metálica que impide que un rayo pase al interior de un avión. La corriente pasará de la punta de las alas al fuselaje y saldrá por la cola del avión sin provocar ningún accidente.
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¿Cómo evitan los aviones los rayos?
La solución para la protección de los aviones contra los rayos (LSP) es la jaula de Faraday , inventada mucho antes por Michael Faraday en 1836. Una jaula de Faraday es una jaula de material conductor (normalmente metal) que se utiliza para proteger todo lo que contiene de los campos electromagnéticos.
¿Por qué los aviones no se ven afectados por los rayos?
El revestimiento del avión, hecho de material conductor, crea lo que se conoce como una jaula de Faraday . Esta protege el interior del avión de los campos eléctricos externos y neutraliza en gran medida el efecto del rayo.
En caso de condiciones meteorológicas extremas, los controladores aéreos siempre dirigirán las aeronaves sobre o alrededor de tormentas eléctricas severas . Esto es para evitar turbulencias incómodas o cualquier daño a la aeronave. Recuerde que su avión nunca será dirigido a volar a través de una tormenta severa.
Estas líneas blancas que vemos en el cielo no son más que el resultado de la condensación que se produce a determinadas alturas y bajo ciertas condiciones del vapor de agua expulsado por parte de los aviones.
A menudo, pueden surgir múltiples peligros rápidamente. Por lo tanto, los pilotos deben evitar volar en tormentas eléctricas o cerca de ellas . En realidad, los rayos no representan un peligro tan grave para la aviación como se cree, ya que las aeronaves están equipadas con pararrayos de descarga estática.
En casos excepcionales, donde la lluvia se asocia con tormentas eléctricas y condiciones climáticas extremas, los vuelos pueden ser retrasados, desviados o cancelados por precaución, siempre priorizando la seguridad de los pasajeros y la tripulación.
¿Hacia qué lado se debe volar para evitar una tormenta eléctrica?
Si se acerca a una línea de tormentas y se enfrenta a un momento de "¿debería girar a la derecha o a la izquierda?", girar hacia la ruta contra el viento suele ser la mejor decisión.
Todos los aviones comerciales que transportan pasajeros están equipados con un radar aerotransportado para detectar tormentas eléctricas y, como este radar puede localizar tormentas eléctricas a una distancia de hasta 120 millas, le da al piloto tiempo suficiente para tomar medidas para evitarlas.
¿Por qué los aviones no despegan durante las tormentas eléctricas?
Turbulencia, granizo y formación de hielo
La turbulencia puede sobrepasar los límites estructurales de una aeronave, lo que puede provocar una falla catastrófica. Incluso los pilotos de grandes aeronaves comerciales, diseñadas para soportar tensiones considerables, evitan volar en medio de tormentas eléctricas debido a estos riesgos.
Las aeronaves modernas están diseñadas para resistir la caída de rayos , pero aún pueden producirse daños significativos debido a otros factores, como el granizo y la velocidad del viento. Continúe leyendo para obtener toda esta información, además de respuestas a algunas de las preguntas más frecuentes sobre volar en condiciones meteorológicas severas.
La práctica es conocida como “siembra de nubes” y supone inyectar yoduro de plata en las nubes de tormenta con el objetivo de reducir el tamaño del granizo, hasta el punto incluso de que se derrita antes de caer al suelo, y evitar así los daños que puede provocar, especialmente en zonas productivas.
Aunque la lluvia por sí sola rara vez cancela vuelos, si la lluvia es parte de un sistema meteorológico severo con peligros como tormentas eléctricas, relámpagos o vientos fuertes, los vuelos pueden cancelarse para evitar poner en riesgo la seguridad de los pasajeros y la tripulación .
El avión, en realidad, actúa como una jaula de Faraday, una estructura metálica que disipa la energía del rayo sin que este afecte al interior de la aeronave. La electricidad se desplaza a lo largo del fuselaje, sin causar daños a los pasajeros ni a los sistemas electrónicos del avión.
Para ser liberado por una aeronave, se enciende una bengala de yoduro de plata y se dispersa mientras la aeronave atraviesa la nube. Cuando se liberan por medio de dispositivos en el suelo, las partículas finas se dispersan en dirección del viento y hacia arriba, mediante corrientes de aire ascendente.
Los productos químicos más comunes para la siembra de nubes incluyen yoduro de plata, yoduro de potasio y hielo seco (dióxido de carbono sólido) . También se ha utilizado propano líquido, que se expande hasta convertirse en gas.
Un sistema repelente de lluvia permite aplicar el repelente químico mediante un interruptor o pulsador en la cabina . La cantidad adecuada de repelente se aplica independientemente del tiempo que se mantenga pulsado el interruptor. Este sistema solo debe utilizarse en condiciones de mucha humedad.
La NTSB registró 40 accidentes aéreos relacionados con rayos . Se reportaron 10 accidentes de aviones comerciales, 4 de los cuales se asociaron con 260 fallecidos y 28 heridos graves.
Jaula de Faraday : La jaula de Faraday es una estructura conductora que impide la entrada de campos eléctricos o los atrapa en su interior. La jaula de Faraday, utilizada en aeronaves, consiste en un material conductor integrado en la superficie exterior del fuselaje. Los rayos transportan alto voltaje y corriente al impactar el fuselaje.
Es por eso que los pararrayos son una parte esencial del diseño de protección contra rayos en los aviones. Estos pararrayos están diseñados para atraer los rayos y proporcionar una ruta de descarga segura hacia tierra, evitando que el rayo impacte directamente en la aeronave.