Entre estos factores se pueden citar: la gran extensión en términos de latitud, la presencia de las cadenas montañosas de la Costa y de los Andes, la existencia de la corriente fría de Humboldt, la presencia del Anticiclón del Pacífico y del Frente Polar.
“Las lluvias en Chile se originan fundamentalmente por los sistemas frontales de latitudes medias que avanzan desde el Océano Pacífico hacia el Este, a través del sur del territorio nacional”, explicó Montecinos.
Las islas de la Patagonia, especialmente las que se ubican cerca del límite entre las regiones de Aysén y Magallanes, son las zonas de Chile en dónde más llueve. Ahora, en cuanto a las grandes ciudades del país, históricamente la que más lluvias acumulaba era Valdivia.
La tendencia al aumento de la temperatura media ha sido del orden de 0.13 °C por década, en el período 1961 al 2019. La localidad donde se observa el mayor aumento de la temperatura en el periodo 1961-2019 es Curicó con 0.21°C por década.
1. Mawsynram, India . Mawsynram ostenta el título de lugar más húmedo del planeta, con casi 11.871 mm de lluvia al año. Enclavado en las colinas Khasi de Meghalaya, India, atrae las densas nubes monzónicas de la Bahía de Bengala.
Meteoróloga explica por qué lluvias en el norte han sido tan intensas
¿Por qué Chile es un país vulnerable al cambio climático?
Debido a sus características demográficas, Chile es un país altamente vulnerable al cambio climático, generando aumento de las temperaturas, escasez de precipitaciones, sequías, olas de calor, retroceso de glaciares y erosiones de las costas.
Se prevé que el cambio climático modifique la magnitud, frecuencia, intensidad y exposición a los riesgos físicos en Chile, especialmente debido a los cambios en la temperatura y las precipitaciones. Se prevé que las temperaturas aumenten entre 1,4 °C y 1,7 °C para mediados de siglo y entre 3 °C y 3,5 °C para finales de siglo en todos los escenarios de emisiones.
En el desierto de Atacama, una lluvia medible —es decir, de 1 mm o más— puede tener lugar una vez cada 15 o 40 años —se han registrado periodos de hasta 400 años sin lluvias en su sector central—.
Los factores más importantes que controlan el clima en Chile son el anticiclón del Pacífico Sur, el área de baja presión circumpolar austral, la fría corriente de Humboldt y la cordillera de los Andes.
Daños directos por inundaciones: Las lluvias fuertes pueden provocar inundaciones que desbordan ríos y arroyos, arrastrando todo a su paso y dañando ecosistemas, al mismo tiempo que contaminan el agua con productos químicos y pesticidas.
El único pueblo del mundo donde nunca llueve, ya que se encuentra por encima de las nubes, es Al-Hateeb, ubicado en el área de Haraz, en el distrito de Manakhiya, al oeste de la capital yemení, Sana'a.
Pero hay un lugar en el que no se puede eludir la lluvia, porque en la plaza del centro de Liubliana, la capital de Eslovenia, hay precipitaciones todos los días del año.
Las sequías son periodos prolongados de tiempo seco causado por la falta de lluvia, lo que produce escasez de agua. Los periodos de sequía pueden causar desabastecimiento de agua y problemas de salud pública.
Desde la Región de Valparaíso, por la costa, hacia el sur, se superan los 300 mm de precipitación anual y se comienza a notar fuertemente el gradiente meridional de precipitación: Valparaíso con ~360 mm anuales, Curicó con ~600 mm, Concepción con ~980 mm y Valdivia con ~1700 mm.
Por su parte, Puerto Varas tuvo -4,6° y Coyhaique registró las temperaturas más bajas del país: los termómetros de la estación Teniente Vidal marcaron -10,8° y la de Balmaceda -18,9°. En tanto, en algunas zonas del norte también se registraron heladas.
El desierto de Atacama es comúnmente conocido como el lugar no polar más seco del mundo, especialmente los alrededores de la ciudad abandonada de Yungay (en la Región de Antofagasta, Chile). La precipitación media es de unos 15 mm por año, aunque algunos lugares reciben de 1 a 3 mm por año.
Hace 14 años que no llueve en Alto Hospicio ni en la región circundante del desierto de Atacama. Estas condiciones de sequía, unidas a las fibras no biodegradables, predominantemente sintéticas y derivadas del petróleo con las que se fabrica la ropa moderna hicieron que el montón nunca se encogiera.