Los aviones se arrancan mediante aire comprimido. El compresor se encarga de comprimir el aire antes de introducirlo en la cámara de combustión. El empuje aumenta cuanto mayor es la compresión (mayor ratio de compresión).
El sistema de arranque es el encargado de poner en marcha el motor, acelerándolo hasta alcanzar unas r.p.m. mínimas en que se puede activar el encendido de forma que a partir de ese momento obtenga ya la energía necesaria para proseguir de forma continua su propio funcionamiento.
Jet A es el tipo de combustible usado en aeronaves civiles. Jet A también se usa en algunas aeronaves militares. JP-5, JP-8 y Jet A son líquidos incoloros inflamables que huelen a kerosén. Estos combustibles son una mezcla de muchos compuestos llamados hidrocarburos.
Para generar electricidad las magnetos deben girar, así que para poner en marcha el motor el piloto acciona el arranque (llave en START), alimentado por la batería, con lo cual se hace girar al cigüeñal y este a su vez las magnetos.
Contiene 3 tanques de combustible JP-1: el tanque número 1, ubicado en el ala derecha; el tanque número 2, en el ala izquierda; y el tanque número 3, el cual está localizado en la parte inferior del fuselaje, con capacidad total de 5142 galones aprox. La cabina es presurizada mediante el sistema de aire acondicionado.
En la aviación moderna se emplean básicamente dos tipos de motores, los de turbofan y los de turbohélice. Si bien, en la aeronáutica también se emplean motores con combustibles sólidos, los montados en aviones, tanto comerciales como militares, emplean combustibles líquidos.
Para generar electricidad, los aviones modernos están equipados con generadores que convierten la energía mecánica producida por los motores durante el vuelo en energía eléctrica. Además, los alternadores desempeñan un papel importante al generar electricidad cuando los motores están en funcionamiento en tierra.
¿Qué son los magnetos de un avión? Los magnetos son unos pequeños generadores que producen la corriente necesaria para hacer saltar la chispa en las bujías, provocando la ignición que necesita el motor para empezar a funcionar.
¿Cuántos litros de combustible gasta un avión por hora?
En su pieza, compara dos de los modelos comerciales más comunes, el 767 y el 320. Si este último tiene capacidad para 24.208 litros y quema 1.920 de promedio a la hora, el primero asume hasta 90.774 y consume 4.800 litros por hora.
El consumo de los aviones de caza resulta muy elevado y el momento en el que más combustible se quema es en el despegue. En la carrera de despegue y con quemador, que es lo más común, el avión puede llegar a consumir entre 400 y 500 litros.
Cuenta con un punto de inflamabilidad superior a 38°C y una temperatura de ignición de 210°C, por lo que se considera lo suficientemente seguro como para utilizarlo en grandes aeronaves. Para mejorar aún más sus características se incluyen otros aditivos al combustible.
En caso de fallar un motor, se produciría un desequilibrio de fuerzas entre los dos lados del avión (un motor seguiría tirando pero el otro no). Este desequilibrio provoca que el avión rote ligeramente hacia el lado del motor inoperativo.
Para permanecer en el aire y volar, la aeronave necesita avanzar. Dado que la elevación se produce cuando el ala empuja el aire hacia arriba para acelerar, las alas deben moverse a través del aire, acumulando velocidad para seguir produciendo elevación.
La alimentación de energía eléctrica en los aviones es principalmente corriente alterna, por lo que es esencial que el sistema de alimentación externa incluya una sección mediante la cual se pueda aplicar una fuente externa de corriente alterna.
El anemómetro, también llamado indicador de velocidad aerodinámica, velocímetro o indicador de velocidad horizontal (Airspeed Indicator), es el instrumento que mide la velocidad relativa del avión con respecto a la masa de aire en que se mueve, e indica esta velocidad en millas terrestres por hora "m.p.h.", nudos " ...
El sistema eléctrico de una aeronave tiene por objeto proporcionar la energía necesaria para que puedan ser utilizados los sistemas y accesorios de la aeronave, tales como equipos de radio, navegación, etc.
Para que un avión se sustente en el aire es necesario mantenerlo en movimiento, de modo que el aire fluya a lo largo de las alas. Para conseguir el avance del avión se recurre a propulsores, como los motores de hélices y los turborreactores.
Los fabricantes de motores también están encontrando formas de aligerar sus turbinas, que tienen un peso medio de 6.350kg cada una en el caso de los aviones de gran tamaño.
Por su capacidad de estanque los aviones cisterna se clasifican en livianos, de menos de mil litros de capacidad; medianos, de mil a 5.500 litros; y pesados, más de 6.000 litros.
Si se tiene en cuenta el precio teórico de cada avión, este pedido podría situarse en torno a los US$1.200 millones. Sus precios de catálogo son de US$120 millones para un A320neo y unos US$140 millones para un A321neo, aunque los importes reales suelen ser sustancialmente más económicos.