Se cree que los Tartessos, civilización del suroeste de la península Ibérica, fundaron Sevilla en torno al siglo IX antes de Cristo (a. C.), bautizándola con el nombre de Spal o Ispal.
El origen de Sevilla, aún hoy, sigue siendo confuso, aunque como tantas ciudades tiene sus leyendas; hay quien la asocia con la fabulosa Tharsis, aunque la teoría más aceptada es que fue fundada por el mismísimo Hércules, quien la cedería a su hijo Hispano.
Sevilla tiene su origen en la antigua Ispal; todas las investigaciones apuntan que la fundación de Sevilla se sitúa en un terreno elevado junto al río Guadalquivir en el siglo VIII a.C. El poblado tartesso, Ispal, desarrolla un comercio activo con navegantes griegos, fenicios y cartagineses, quienes arriban a la ciudad ...
La historia de Sevilla comienza durante la Edad Antigua con el surgimiento en el actual centro de Sevilla de un primer núcleo de población con comerciantes fenicios, con el nombre de Spal.
Siglo XII. En el mismo emplazamiento donde se ubica la catedral había una mezquita, no obstante, Fernando II la cristianizó una vez tomó la ciudad en la reconquista de Sevilla. Sin embargo, fue destruida por un terremoto en 1356. Por este motivo, Carlos V mandó construir una catedral en el mismo lugar.
SEVILLA, PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD | Documental Completo
¿Quién mandó a construir la Giralda de Sevilla?
Fue el califa Abu Yaqub Yusuf el que ordenó, el 26 de mayo de 1184, la construcción del alminar de la mezquita. Con la muerte de Yusuf se prosigue el proyecto bajo el mandato de su hijo y nuevo califa, Abu Yúsuf al-Mansur (Muminin).
El nombre de «España» deriva fonéticamente de Hispania, nombre con el que los romanos designaban geográficamente al conjunto de la península ibérica, término alternativo al nombre Iberia, preferido por los autores griegos para referirse al mismo espacio.
En resumen, Sevilla vendría el árabe hispánico أشبيليّة (išbíliya), a su vez del latín Hispalis y del fenicio Sefela ("valle"). Otra teoría es que “Ishbiliya” podría derivar de la palabra árabe “sabil”, fuente o manantial.
Más allá de la famosa combinación del Alcázar, la Catedral con la Giralda y el Archivo de Indias o la Plaza de España, Sevilla es un destino turístico que también guarda monumentos y edificios que no puedes dejar de visitar.
Hispalis. La antigua Sevilla fue denominada la colonia Julia Rómula Hispalis. Fue una de las ciudades más importantes del sur de la península ibérica, y curiosamente un personaje histórico de Roma: Julio César, está documentado que estuvo en la ciudad en la época de la Guerra Civil contra Pompeyo.
Se cree que los Tartessos, civilización del suroeste de la península Ibérica, fundaron Sevilla en torno al siglo IX antes de Cristo (a. C.), bautizándola con el nombre de Spal o Ispal. La ciudad sería ocupada años más tarde por los fenicios y los cartagineses.
Aunque Sevilla capital es conocida por monumentos como la Giralda, el Real Alcázar o las ruinas del templo romano de la calle Mármoles, existe un lugar que remonta la historia de la región a más de 4.000 años atrás: Gandul.
Los primeros nombres que recibió Sevilla fueron Spal o Ispal. Los romanos adaptaron este término hasta que se convirtió en Hispalis, pero la ciudad volvió a cambiar de nombre durante la época andalusí y se transformó en Ishbiliya.
Sevillano puede referirse a: Gentilicio. La persona natural de Sevilla, localidad española. Gentilicio de la persona nacida en la provincia de Sevilla, Andalucía, España.
Aunque si se entiende nación como reino, España tampoco sería la más antigua del mundo. A pesar de que los académicos y expertos con los que hemos hablado para elaborar este tema difieren en algunas fechas, todos coinciden en señalar que las afirmaciones sobre que España es la nación más antigua del mundo son falsas.
Los romanos le habrían dado a Hispania el significado de 'tierra abundante en conejos', un uso recogido por Cicerón, César, Plinio el Viejo, Catón, Tito Livio y, en particular, Catulo, que se refiere a Hispania como península cuniculosa (en algunas monedas acuñadas en la época de Adriano figuraban personificaciones de ...
Fue en el siglo XII cuando se construyó la Mezquita Mayor de la ciudad, justo en el lugar donde hoy se encuentra la actual Catedral. Tras la reconquista cristiana en el siglo XIII, se cristianizó y se convirtió en la catedral de la ciudad, siendo ya oficialmente la Catedral de Santa María de la Sede.