Los síntomas físicos de la aerofobia pueden incluir una sensación de pánico, falta de aliento, corazón acelerado, náuseas y mareos. Para algunas personas, el simple hecho de pensar en subir a un avión puede ser suficiente para provocar estos síntomas.
Las causas de la aerofobia son de lo más variada. Sin embargo, el nexo en común es el miedo a sufrir un accidente aéreo, como es lógico. Ahora bien, la casuística es muy diferente, según cada caso. Puede que esta fobia venga de alguna experiencia traumática, ya sea propia como de algún ser cercano.
Este miedo puede ser causado por una serie de factores, como el miedo a volar a alturas elevadas, el temor a la turbulencia o el temor a perder el control y experimentar un accidente.
¿Cómo SUPERAR el MIEDO a VOLAR? | Psicólogo RESPONDE a este interrogante | Ansiedad, atrapamiento |
¿Qué tomar para los nervios antes de subir al avión?
Utilizar suplementos naturales, tales como valeriana, melatonina y magnesio, junto con la práctica de técnicas de relajación, te permite disfrutar de un vuelo más apacible. Además, al llegar a tu destino, estarás mejor equipado para superar de manera más efectiva los efectos del jet lag.
Las personas que tienen fobia a volar, manifiestan los síntomas típicos de la ansiedad. Tal ansiedad no se manifiesta solo durante el vuelo, sino que aparecen con antelación desde que la persona sabe que va a coger un vuelo, y en todas las situaciones relacionadas con el viaje.
En resumen estas son algunas enfermedades que impiden viajar en avion: Enfermedades cardíacas graves: Infarto de miocardio reciente, arritmia, angina de pecho, etc. Enfermedades pulmonares y enfermedades respiratorias: Neumotórax, EPOC, derrame pleural, falta de aire en reposo etc.
Aunque el avión es el medio de transporte más seguro y la posibilidad de sufrir un accidente es de 1 entre 2,4 millones, son muchas las personas que padecen aerofobia. De hecho, el 25% de la población mundial tiene miedo intenso e irracional a viajar en avión.
¿Qué pasa si te da un ataque de pánico en un avión?
Consecuencias del miedo a volar
Por tanto, esa persona terminará quedándose al margen de los demás, aislándose del grupo. En los casos en los que la persona logra subirse al avión, lo usual es que se sienta avergonzada por su miedo, teme hacer el ridículo delante de los otros pasajeros o tener un ataque de pánico.
La presión en la cabina de un avión en pleno vuelo es equivalente a la que se siente en altitudes elevadas, similar a subir a una montaña. Esto deriva en una cantidad menor de oxígeno disponible, lo que puede dificultar la respiración y causar molestias como dolores de cabeza y mareos.
A partir de la 36 semana de gestación (32 si es múltiple y sin complicaciones) IATA te recomienda no volar. Si de todas formas necesitas viajar, deberás presentar un certificado de tu médico al embarcar. Una semana después del parto ya puedes volver a volar.
¿Qué enfermedades cardíacas impiden viajar en avión?
Cardiopatías y viajes
Las personas con una angina de pecho grave o que haya empeorado deben evitar volar. En este caso, sus síntomas pueden agravarse porque en la cabina de los aviones que vuelan a gran altura hay menos oxígeno.
El tratamiento debe ser con antidepresivos y puntualmente utilizar ansiolíticos (sobre todo, benzodiacepinas). Entre los antidepresivos más eficaces se pueden utilizar paroxetina, sertralina o escitalopram venlafaxina. Entre los ansiolíticos, se pueden usar benzodiacepinas, alprazolam y diazepam.
Si quiere experimentar las menores turbulencias posibles, lo mejor es reservar un asiento justo en las alas. Está demostrado que las turbulencias se notan menos allí. Otra buena elección es un asiento en la parte delantera del avión, ya que las vibraciones también son menos perceptibles allí que en la parte trasera.
Cada avión tendrá su propio techo de servicio. es decir, la mayor altitud a la que puede volar. Cuando un avión excede esto, las alas no pueden producir suficiente sustentación debido a la atmósfera más delgada y, por lo tanto, el avión vuelve a caer hasta su techo de servicio (o justo debajo).
¿Qué es el trastorno de pánico? Las personas con trastorno de pánico tienen ataques repentinos y frecuentes. Estos ataques se caracterizan por una ola repentina de temor o incomodidad, o bien, una sensación de perder el control, incluso cuando no hay un peligro real o un factor desencadenante claro.
Lleva un buen libro contigo, realiza crucigramas, escucha música relajante o entabla una conversación con el pasajero que está a tu lado. El objetivo es desviar tus pensamientos de las preocupaciones relacionadas con el viaje y mantener una actitud positiva. Practica ejercicios de relajación antes y durante el vuelo.
No debemos tener miedo a las turbulencias ya que los aviones están diseñados para soportar hasta las turbulencias más agresivas. Los pilotos, además de estar perfectamente preparados para hacer frente a estas adversidades, tienen trucos para enfrentarse a las turbulencias.
El miedo es una emoción natural y universal que todos experimentamos en algún momento de nuestras vidas. Puede ser una respuesta emocional a una situación peligrosa, una respuesta a la incertidumbre o una respuesta al cambio. Sin embargo, el miedo también puede ser paralizante y limitante si no se maneja adecuadamente.