La diarrea del viajero es la presencia de heces sueltas y acuosas. Las personas pueden contraer la diarrea del viajero cuando visitan lugares en donde el agua no es limpia o no hay una manipulación segura de los alimentos. Esto puede incluir países en desarrollo en Latinoamérica, África, Medio Oriente y Asia.
El enteropatógeno que con más frecuencia produce diarrea del viajero es la Escherichia coli. Dependiendo de diferencias serotípicas, virulencia y cuadro clínico se han detectado cinco tipos de E. coli entéricas: E. coli enterotoxigénica (ETEC), E.
La diarrea del viajero suele desaparecer por sí sola en varios días. Los síntomas pueden durar más y ser más graves si está causada por ciertas bacterias o parásitos. En tales casos, es posible que necesites medicamentos con receta médica para ayudarte a mejorar.
Dieta y rehidratación: la diarrea puede provocar deshidratación. Por este motivo, es importante incrementar el consumo de líquidos. Además, es recomendable seguir una dieta con presencia de arroz hervido, fruta, pan tostado y sopas, y sin lácteos.
El riesgo de deshidratación que implica la diarrea obliga a beber mucho líquidos, pero debe hacerse según las siguientes pautas: Limonada alcalina: se prepara con agua, zumo natural de limón y bicarbonato. Soluciones de rehidratación oral: se venden en farmacias, generalmente en forma de sobres que se diluyen en agua.
Las dos causas más comunes de enfermedades diarreicas son los rotavirus y la bacteria Escherichia coli (en niños pequeños puede causar el síndrome urémico hemolítico. Malnutrición: Los niños que la padecen son más vulnerables a las enfermedades diarreicas.
Unas semanas antes de iniciar el viaje vale la pena tomar algún suplemento de probióticos. Ayudan especialmente aquellos que tienen Lactobacillus acidophilu, Lactobacillus rhamnosus y Lactobacillus reuteri.
Llama de inmediato al proveedor de atención médica si tienes alguno de los siguientes signos o síntomas: Seis o más deposiciones líquidas por día durante más de dos días. Sangre en las heces o en la zona rectal. Pérdida de peso debido a la diarrea.
Es además un probiótico que promueve la regularidad intestinal. El sistema digestivo contiene una serie de bacterias buenas que ayudan a digerir los alimentos, las cuales aumentan al ingerir yogur griego.
Yogur: Este alimento va bien por dos funciones una al ser un probiótico puede acortar ligeramente la duración de la diarrea y favorece la formación de bacterias digestivas. Alimentos que contienen pectina que tiene efecto astringente, algunos ejemplos de alimentos serían: zanahorias, las uvas, el pepino.
2 cápsulas (4 mg) como dosis inicial seguida de 1 cápsula (2 mg) tras cada deposición diarreica. La dosis máxima para adultos es de 8 cápsulas (16 mg) al día. 1 cápsula (2 mg) como dosis inicial seguida de 1 cápsula (2 mg) tras cada deposición diarreica.
Arroz blanco hervido, sopa de pasta o sémola de trigo, zanahoria cocida o en puré, pan blanco (también en tostadas), pescado blanco hervido o a la plancha, carnes magras como pollo cocido o ternera, huevo cocido, manzana rallada, membrillo, yogurt.
Consume alimentos ricos en pectina, como compota de manzana, bananas y yogur. La pectina, una fibra soluble en agua, ayuda a disminuir la diarrea. Consume alimentos ricos en potasio, como jugos de fruta, bebidas para deportistas, patatas sin piel y bananas.
Tomar demasiadas cápsulas pueden provocar coordinación anormal, estupor, contracción de la pupila, aumento de la tensión muscular, dificultad para respirar (los niños son más sensibles a estos efectos que los adultos) y reducción de la cantidad de orina.
¿Qué es mejor para la diarrea paracetamol o ibuprofeno?
Si la diarrea se acompaña de fiebre debe darse una medicina para bajarla, por ejemplo paracetamol. Si hay dolor abdominal puede precisarse un analgésico (paracetamol, nolotil®, buscapina compositum®). Si la diarrea se acompaña de náuseas o vómitos puede necesitarse una medicina para no vomitar (primperam® o motilium®).
Existen muchas causas para la diarrea acuosa, entre ellas la malabsorción de carbohidratos, como la intolerancia a la lactosa, sorbitol y fructosa, las infecciones intestinales o el síndrome del intestino irritable.
La diarrea que dura más de algunos días puede ser un signo de un problema más serio. La diarrea crónica, que dura al menos cuatro semanas, puede ser un síntoma de una enfermedad crónica. Los síntomas de la diarrea crónica pueden ser continuos o pueden aparecer y desaparecer.