La mayoría de los cruceros atracan en Molo Beverello junto a la terminal de cruceros de Nápoles, la Stazione Marittima. Molo Beverello se encuentra justo en el centro de la ciudad, a un corto paseo de muchos lugares de interés frente al mar.
Diríamos que 2 días completos son tiempo suficiente para conocer lo esencial de Nápoles (sin salir de la ciudad, ni hacer excursiones). Si quieres conocer lugares cercanos y dispones de tiempo, añade unos cuantos días extra al viaje: Pompeya (1 día), Capri (1 día), y por supuesto la Costa Amalfitana (3 días).
Si viajan sin auto, la mejor opción para visitar la Costa Amalfitana desde Nápoles (por libre) es tomar la linea de trenes Circumvesuviana hasta Sorrento y desde allí pueden seguir en autobús o barco. Otra opción desde Nápoles es tomar un tren hasta Salerno, desde allí seguir en autobús SITA bus o un ferry.
Posiblemente lo habrás escuchado muchas veces: Nápoles no es una ciudad segura. Lo cierto es que basta con tener cuidado y actuar con sentido común para disfrutar al cien por cien de esta magnífica ciudad. Si llegas en tren, atención a tus pertenencias.
Spaccanapoli, Vía Tribunal, Duomo, Vía San Gregorio Armeno, Iglesia de San Ángelo a Nilo, Capella de San Severo, Chiesa San Domenico Maggiore, Piazza Bellini, Museo Arqueológico de Nápoles.
El precio del billete en ferry de Nápoles a Capri ronda los 44€. La tarifa puede variar en función de los descuentos, el tipo de asiento y la elección de embarcar en un vehículo.
El billete más interesante desde el punto de vista turístico es el simple, con un precio de 1,50 € (1,60 US$ ). Pero en el caso de que se quiera viajar mucho, la opción más recomendable es la del billete de un día, con un precio de 4,50 € (4,90 US$ ) (también permite utilizar el autobús).
El centro de Nápoles se caracteriza por sus iglesias (más de 300) entre las cuales se destacan el Duomo di Napoli o Cattedrale metropolitana di Santa Maria Assunta, San Giorgio Maggiore y San Giovanni Maggiore con elementos arquitectónicos que se remontan hasta los siglos IV y V antes de Cristo.
Se puede subir desde el funicular de Montesanto. La entrada es de pago 5€. Es posible subir en ascensor a la plaza de armas y desde allí hay unas vistas excepcionales de Nápoles y su bahía, pero realmente no hay mucho más que ver en el castillo que por otra parte es una mole imponente.
Además del efectivo, puedes pagar tus compras con las tarjetas de crédito más populares. En los centros más grandes, también es posible pagar con smartphone, mediante las distintas aplicaciones dedicadas. Actualmente, los principales circuitos de pago electrónico activos son: Visa.
El mejor momento para visitar Nápoles es durante los meses de primavera, o bien en otoño, ya que en estas fechas las temperaturas son más suaves y podréis evitar la incomodidad de los extremos.
Dedica unas 4 o 5 horas a explorar por completo las ruinas de Pompeya. Aunque hay una cafetería dentro de las ruinas, se recomienda comer antes de entrar en el recinto. El primer domingo del mes permite la entrada gratuita a Pompeya, pero ten en cuenta que ese día el yacimiento estará muy concurrido.